La movilidad sostenible se ha consolidado como un pilar clave en la lucha contra el cambio climático y la transformación urbana. A nivel global, el transporte representa casi el 25% de las emisiones de CO₂, donde la movilidad terrestre aporta cerca del 50% del total de las emisiones del sector transporte. Lo anterior ha impulsado a ciudades y países a adoptar soluciones como el transporte eléctrico, la expansión de ciclovías y sistemas de movilidad compartida.
En la región, Bogotá destaca con su red de 630 km de ciclorrutas y flotas de buses eléctricos (como el Transmilenio), Uruguay avanza con su política de movilidad eléctrica, mientras que México avanza con esquemas de electromovilidad, Brasil por su parte con su política de biocombustibles y Argentina con la implementación de Gas Natural en el transporte urbano, la región avanza sostenidamente. Quedan aún desafíos por superar, pero la región presenta por su diversidad múltiples rutas para descarbonizar el transporte terrestre, este espacio ofrecerá la oportunidad para debatir las ventajas y oportunidades de cada modelo. ¿Cómo aceleraran los gobiernos de Latino América y el Caribe esta transición sin dejar a nadie atrás?